lunes, 21 de noviembre de 2022

CLARAS OSCURIDADES

PENSADOR NOCTURNO

 

 Todo se desvanece, mi cuerpo avisa a mi alma, una vez más has llegado, poco a poco empieza tu supuesto amor. Es absurdo recordar aquel pasado que me ató a ti, ¿Cómo es que no logre ver tu verdadero ser? Me has usado, ultrajado, molinos de miedos inundan mi vida, no logro caminar ni en nuestra casa; angustiante es observar aquel reloj que registra el tiempo en el que aun puedo respirar. Mi alma desesperada por un suspiro; un respirar tranquilo fantasea con una vida feliz, crea recuerdos hermosos… perfectos donde sólo hay ramas bellas y alegres, pero mi realidad no se lo permite. Invade con olas de lágrimas que mis ojos han derrochado por tus equivocaciones, tus supuestos ¨errores¨.

He dejado de contar heridas, lo único que cuido son cadenas, cadenas que tú has puesto sobre mí. Has llegado simplemente al borde donde me ves como un animal, un ser viviente que debe de servirte, no has demostrado ni un mísero segundo de arrepentimiento o culpa, has arrancado con odio y desprecio esos sentimientos de tu ser. Busco en mis recuerdos, en mi sonrisa, en cualquier rincón de mi cuerpo y alma, pero…. Ya no encuentro nada.

Todo el dolor, esos golpes abruptos, las crueles palabras, esas miradas violentas las he logrado suprimir, es una búsqueda infinita en donde te seré sincera, no tengo las fuerzas ni el interés de encontrarlos. Al contrario al buscarlos me encuentro con más razones para odiarte, de hacerme ver la verdad sobre ti o aun no recuerdas como empezó todo…. Porque yo sí lo recuerdo como si fuese ayer, llegaste más temprano de tu trabajo, yo no terminaba de limpiar y la comida no estaba lista, sin decir un ¨hola amor¨ o tal vez un ¨ya llegue¨. Quienes hablaron fueron tus puños, los cuales lanzabas a mi cara a mi estómago, no parabas. Al contrario seguías expandiendo tu furia, sacando una navaja ¿Es que no recordabas que yo te la había dado como regalo? Yo era el blanco de esa hoja afilada, me cegué a mí misma con mis lágrimas impulsadas de miedo, mi cuerpo inmovilizado por el dolor, un grito desgarrador nació de mí, al sentir lo frío y tajante de esa navaja, dibujaste plasmando tu inicial en mi espalda <Pensador Nocturno>. Eso te dejo satisfecho, lo único que nombraste al terminar fue un ¨límpiate¨.

Aquel acto que sólo fue el inicio; marco una distancia entre el miedo y mi instinto de vivir. Y toda tu motivación al golpearme fue <el despido que tú mismo habías provocado al golpear a tu jefe> ¿Cómo te atreviste? Entiendo que estabas enojado, pero se suponía que era tu esposa, la mujer que amabas, sin embargo ya no era así; me convertí en un costal. En un objeto que podías violentar y jugar a tu gusto. Sonará irónico pero he llegado a creer que el hospital, esa sala de emergencias que visito se ha vuelto mi hogar, donde siento más calidez que en aquella casa… mi supuesto ¨hogar¨. Me cansa repetir las mismas escusas, mentiras para protegerte. Desayuno, como y ceno golpizas de tu parte. Me dirijo al espejo observo mi reflejo, lo que veo: una obra abstracta realizada por un hombre vil, firmada con una inicial afilada.

 Piensas que soy débil, pobre e indefensa me criticas sin saber, me maltratas sin cesar, sólo me haces llorar. ¡Ya no más! En esta casa, húmeda, oscura, deteriorada, uniré mis fuerzas no por ser cruel o egoísta, sólo busco sobrevivir. ¡Hombre! caes a mis pies, tu instinto te hace caer por más que me desprecies, te otorgo placer, sin darte cuenta te encuentras indefenso, débil… Intentas golpearme una vez más… Pero no lo logras, estas muy débil. Por fin me protegeré no me quedaré quieta a esperar que termines de golpearme. Estoy frente a ti, ahora yo tengo el control. Al darte cuenta me miraste por última vez, rogando perdonar tu alma llena de maldad, veo tus ojos verdes que a simple vista me logran engañar. Pero, ¡Ya no más! Veo tus mentiras al recordar cada golpe que me dirigías. Adiós… te despido con esperanza.

 

Valle de San Quintín, Baja California, México.


Agradecemos la colaboración de PENSADOR NOCTURNO, que se unió a nuestra convocatoria <16 días de activismo por la eliminación de la violencia contra las mujeres> promovido en la comunidad de San Quintín, Baja California, México.

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